lunes, febrero 4

CONTRASTE SOBRE RIELES

Para el mantenimiento de las vías que la empresa SEFECHA utiliza en su recorrido por el departamento Vera la provincia de Santa Fe destinas $ 6.000 por mes. En la otra punta de la geografía santafesina se invertirán 3.500 millones de dólares para la construcción de un tren de alta velocidad. Ambas realidades reflejan las asimetrías de una provincia que carece de política una ferroviaria para todo su territorio.

La semana pasada doce personas resultaron heridas cuando el tren de la empresa SEFECHA (Servicios Ferroviarios Chaqueños) en el que viajaban descarriló y quedó volcado sobre el terraplén de las vías, a unos cinco kilómetros de La Sabana, en la provincia de Chaco. La formación había salido de la localidad santafesina de Cañada Ombú y se dirigía a la estación de Cacui, en las afueras de Resistencia.

La mayoría de los pasajeros eran vecinos de Los Amores y Cañada Ombú – localidades del norte del departamento Vera – que regularmente viajan al Chaco para realizar compras y trámites. Para este sector de la provincia de Santa Fe el servicio de la empresa ferroviaria chaqueña es esencial para romper el aislamiento económico, social y territorial en que se encuentran, luego de la eliminación del ramal de pasajeros de la ex Línea Belgrano durante la década menemista.

Según explicaron las autoridades de SEFECHA, el accidente se produjo por “el mal estado de las vías y durmientes, la falta de mantenimiento en la zona y la precaria situación de trabajadores de las cuadrillas del sector”.

En dialogo con el programa Fuera de Foco, el presidente de la empresa Fabián Morán, sostuvo: “Nosotros tenemos un convenio con la Secretaria de Transporte de la Nación para reparar el sector que va de La Sabana a Charaday (en territorio chaqueños), pero a este otro sector que tenemos conveniado con el gobierno de Santa Fe, le falta mucha inversión para que podamos tener un ramal en buenas condiciones”.

El funcionario no dudo en calificar al accidente del lunes 28 de enero como “una desgracia con suerte”, debido a que la formación descarriló, “por una vía estaba desnivelada y esto hizo que el convoy tenga que marchar por precaución a 12 kilómetros por hora. La máquina se fue deslizando despacito por el terraplén y esto fue amortiguando la caída. Hubo contusiones leves y solo una persona fracturada, pero todos fuera de peligro”, precisó Morán.

“El día del accidente daba mucho miedo ver los rieles sin los clavos, los clavos sueltos, durmientes rotos, o el terraplén flojo por los hormigueros. Ahí tenemos una cuadrilla que no tiene relación de dependencia con SEFECHA y en la zona no tenemos gente con capacitación ferroviaria para atender el sector. Por eso tuvimos que disponer una cuadrilla nuestra de 20 personas que van a trabajar dos semanas en el sector para superar esta coyuntura”.

Esta situación se explica por el escaso aporte que la provincia de Santa Fe realiza para el mantenimiento de las vías. “Nosotros estamos recibiendo un promedio de $ 2,5 por kilómetro recorrido por nuestros trenes, al mes serán unos $ 6.000. Pero este aporte no nos cierra para hacer el mantenimiento en ese ramal”, sostuvo Morán.

De todos modos el funcionario se manifestó confiado en que la gestión de Hermes Binner pueda revertir esta situación. “Creo que en su debido momento vamos a tener que charlar sobre el tema del ferrocarril. Los funcionarios de Santa Fe tienen que apostar por este modo de transportar, al norte de la provincia le vendría muy bien, no solo por el tema de los pasajeros sino por la posibilidad de sacar carga por el Ramal F hacia el puerto de Barranqueras”.

El presidente de la empresa ferroviaria chaqueña, recordó que hace algunos años se barajó la posibilidad de extender el servicio de pasajeros hasta la ciudad de Vera (200 kilómetros al sur del límite interprovincial) pero la falta de compromiso de las autoridades santafesinas frustró el proyecto. Recién el 6 de noviembre del año pasado se logró ampliar el recorrido 50 kilómetros hasta Cañada Ombú, con un servicio de tres frecuencias semanales hacia Resistencia. Para estos pueblos de la zona de los Bajos Submeridionales las vías del ferrocarril son la única alternativa de vinculación en épocas de grandes lluvias o inundación.

“La situación en el norte de Vera es terrible. Quedan aislados por las lluvias y no tienen ningún tipo de comunicación más que el ferrocarril, aseguró Morán. Un claro ejemplo de este aislamiento, surge cuando se comprueba, que la mayoría de los pasajeros accidentados eran oriundos de las localidades de Cañada Ombú y Los Amores. “Es gente que toma el tren a la madrugada para llegar a Resistencia a las siete de la mañana y hacer sus compras o trámites. Asombra mucho ver la cantidad de personas que vienen de Santa Fe para ir a los hipermercados, hacer trámites y distintas gestiones, porque es la única conexión que tienen”.

Los trenes de SEFECHA comenzaron a funcionar en el año 1996 durante la gobernación de Ángel Rozas. Las estadísticas oficiales hablan de 750.000 pasajeros transportados por año, entre los servicios metropolitano, de mediana y larga distancia que todos los días recorren 1.800 kilómetros. A pesar de esta performance, el gobierno nacional mantiene excluida a la empresa estatal chaqueña del sistema de subsidios para el transporte.

Por su parte, la provincia de Santa Fe solo aporta $ 6.000 por mes para el mantenimiento de 50 kilómetros de vías, mientras las nuevas las autoridades aplauden sin cuestionar el megaproyecto del tren de alta velocidad Buenos Aires-Rosario a un costo de 3.500 millones de dólares.

1 comentarios:

Anónimo dijo...

Hay que insistir en el asunto BALA,
Acá en Rosario la prensa seria siembra ilusiones tilingas sobre los beneficios futuros del Bala para la región, desinformando sobre las consecuencias negativas que ya pueden verse, al orientar el endeudamiento del Estado hacia servicios de lujo que pagaremos los pobres a través del IVA a
los alimentos.
Todo cierra: a los ricos el Bala; a los pobres, será LA BALA?

jUANCASARRA /ROSARIO.