lunes, noviembre 13

SUSPENDEN LOS PERMISOS DE EXPORTACIÓN A CINCO FRIGORÍFICOS DE PESCADO

La decisión fue tomada por la Secretaría de Medio Ambiente y el SENASA. Se trata de las empresas Doble Frío, Barbara S.R.L; Pesquera Bruno, Copespa S.A, y Fabrisi. Algunas carecían de licencia, otras no tenían cupo de extracción, y la última construyó una planta sin permiso en Helvecia. En lo que va del año salieron de Santa Fe casi 20.000 toneladas de sábalo por un valor declarado de 36 millones de pesos.

A principios de octubre, la Secretaria de Medio Ambiente de Santa Fe y el SENASA, firmaron un convenio de colaboración con el objetivo de “estabilizar el adecuado manejo de los recursos naturales provenientes de la fauna ictícola”, realizando tareas conjuntas de relevamiento y control, comprometiéndose las partes a “informarse recíprocamente de todas las habilitaciones, permisos, certificaciones, etc., que cada uno de los estamentos (provinciales y nacionales) haya otorgado” hasta la fecha del acuerdo.

Como consecuencia de este entendimiento, la SEMAyDS elaboró una lista de las personas físicas o jurídicas “que se encuentran habilitadas para comercializar pescado de río fuera de los límites de la provincia de Santa Fe”, pidiéndole al SENASA que “solo emita documentación de salida” a las empresas autorizadas por la Secretaría, aclarando que “fuera del listado precedente, ningún establecimiento se encuentra habilitado para la comercialización fuera de los límites de la provinciade Santa Fe, ya que no reúnen los requisitos para tales fines”.

De esta manera, cinco frigoríficos de pescado perdieron su permiso de exportación, que mayoritariamente ocupaban con el sábalo. Según las normas de la SEMAyDS, solo pueden realizar ventas al exterior los establecimientos que cuenten con la habilitación de “Acopiador de Pescado Categoría A” a los cuales se les haya asignado cupo de exportación. En base a estos requisitos el SENASA certifica la mercadería para que pueda pasar por la Aduana rumbo a los mercados extranjeros.

Los frigiríficos que perdieron el permiso de exportación, son los siguientes:

- Doble Frío. Ciudad de Santa Fe. No tiene habilitación ni cupo asignado. En 2006 exportó 249 toneladas de sábalo.

- Barbara SRL. Los Zapallos. No tiene habilitación ni cupo asignado. En 2006 exportó 1.157 toneladas de sábalo.

- Pesquera Bruno. Ciudad de Santa Fe. Tiene habilitación pero carece de cupo. En 2006 exportó 672 toneladas de sábalo.

- Copespa SA. Puerto Gaboto. Tiene habilitación pero carece de cupo. En 2006 exportó 253 toneladas de sábalo.

- Fabrisi. Ciudad de Santa Fe. Tiene cupo pero su habilitación está suspendida por 6 meses por la apertura ilegal de una planta en Helvecia.

Se debe destacar que en los cuatro primeros casos la SEMAyDS no requería del convenio con el SENASA para actuar, ya que, se trata de empresas que vendían pescado al exterior violando las disposiciones establecidos por la propia Secretaría. Esta reticencia para sancionar a los frigoríficos infractores solo puede entenderse como una decisión política tomada en el máximo nivel gubernamental.

Por otro lado, de acuerdo a la información recabada por Fuera de Foco, en lo que va de 2006, entre todos los frigoríficos de pescado asentados en la provincia de Santa Fe exportaron las 20.000 toneladas asignadas por la Secretaría de Medio Ambiente como cupo máximo. Considerando un valor declarado de 600 u$s por tonelada de sábalo, las exportaciones de esta especie llegan a los 36 millones de pesos anuales. Sin embargo, fuentes del sector consultadas, aseguran que el sábalo se comercializa en el exterior a más 1.000 u$s la tonelada, con lo cual, las exportaciones anuales de esta pescado rondarían los 60 millones de pesos.

Si bien el acuerdo entre la SEMAyDS y el SENASA es un avance en la coordinación de esfuerzos para la preservación de la fauna ictícola de nuestros ríos, el organismo nacional rechazó el pedido de la provincia para que controle las medidas del pescado al momento de certificar un despacho de exportación. “Esta representación nacional, establece que dicha cuestión excede el ámbito de su gestión, quedando la misma bajo responsabilidad de la Secretaría”, dice la cláusula quinta del acuerdo firmado el 2 de octubre pasado.

Para poner en práctica este tipo de controles, Marcelo Terenzio debería avanzar en la instalación de un puesto fijo de inspección en cada uno de los seis frigoríficos habilitados para exportar; una medida de fácil implementación que asegura buenos resultados, pero que el funcionario se ha negado a llevar a la práctica.
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