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lunes, octubre 13

¿SE PINCHARON LOS ACUEDUCTOS?

Se prorrogó la apertura de ofertas de la licitación nacional e internacional de la Etapa 1 de los Grandes Acueductos. El acto previsto para el 20 de octubre pasó al 10 de noviembre próximo. La postergación fue solicitada por las empresas que compararon los pliegos. Desde el gobierno provincial admiten que la crisis financiera internacional puede dificultar el avance del megaproyecto.

El Ministerio de Aguas, Servicios Públicos y Medio Ambiente de la provincia postergó el acto de apertura de propuestas de la Licitación Pública Nacional e Internacional convocada para la contratación del Financiamiento, Suministro de Materiales y Ejecución de la obra de los Grandes Acueductos - Etapa 1 - Tramo A.

El acto había sido programado para el día 20 de octubre, y de acuerdo a lo publicado recientemente en el Boletín Oficial, fue prorrogado hasta el próximo 10 de noviembre de 2008.

Según confiaron fuentes bien informadas del Ministerio de Aguas, la postergación obedece a un pedido de las empresas interesadas en esta licitación, preocupadas por la evolución de la crisis financiera internacional y el impacto que pueda tener en el acceso a líneas de crédito necesarias para concretar el megaproyecto.

Es importante recordar que esta licitación fue iniciada durante el último gobierno de Jorge Obeid desde el entonces Ministerio de Asuntos Hídricos conducido por Alberto Joaquín. El esquema general del proyecto contemplaba que la empresa ganadora debería hacerse cargo del financiamiento, la provisión de materiales y la construcción de la obra. Con la llegada del ministro Antonio Ciancio, los pliegos fueron sometidos a revisión, aunque se respetó la estructura original del proceso que ahora resulta postergado.

En una reunión realizada el pasado 10 de septiembre en la Cámara de Senadores el ministro Ciancio comunicó que “el gobierno provincial reinició el proceso licitatorio para las obras que mejorarán la provisión de agua potable en el Gran Rosario y en el centro oeste provincial", adelantando que la apertura de los sobres estaba prevista “para el 20 de octubre próximo".

Con esta decisión se intentó poner en marcha un ambicioso proyecto que en el inicio contempla tres grandes acueductos sobre un total de doce. “Estamos desarrollando una verdadera política de Estado, en donde sustentamos el saneamiento del agua como un pilar fundamental, considerándola un bien social y un derecho humano intransferible", dijo el funcionario luego de la reunión con los senadores.

Aunque todavía no lo admiten a nivel oficial, el derrumbe de las principales bolsas de valores en el mundo puede postergar de manera indefinida el inicio de la obra de los grandes acueductos.

domingo, agosto 3

OBJETAN LA TRAZA SUR PARA EL NUEVO PUENTE SANTA FE-SANTO TOMÉ

Los técnicos de Vialidad Nacional encontraron varias deficiencias en el diseño del nuevo puente Santo Tome-Santa Fe. Advierten sobre el impacto ambiental, urbanístico y social de la traza sur que cruzaría el río Salado por la zona de los cuarteles. Vuelven a tomar fuerza las alternativas ubicadas al norte del Puente Carretero. Desde el Ministerio de Obras Públicas de la provincia esperan que la licitación este en marcha antes de fin de año.

El proyecto elaborado por la Dirección Provincial de Vialidad para el nuevo puente que unirá las ciudades de Santo Tomé y Santa Fe recibió serias observaciones de los técnicos de Vialidad Nacional. Los detalles de estos problemas se conocerán en los próximos días cuando se difunda el contenido del informe elaborado por la Gerencia de Estudios y Proyectos del organismo nacional, y no se debe descartar, que vuelvan a tomar fuerza las alternativas de cruce ubicadas al norte del Puente Carretero.

Se debe recordar que durante la gestión de Jorge Obeid la provincia eligió la denominada Alternativa 7 o traza sur para la ubicación del nuevo puente sobre el río Salado. En agosto de 2006 se presentaron los resultados de los estudios y Ángel Piaggio fue el encargado de efectuar el anuncio: "Nosotros vemos que el ingreso por Riccheri vincula con el aeropuerto en forma casi inmediata y que, además, el lado Santa Fe tiene cabecera en una zona que va a acceder a un emprendimiento turístico, como van a ser los terrenos de lo que es hoy el puerto. Entonces esto empieza a tener una razonabilidad distinta que si lo vemos analizando sólo el sitio por donde cruzamos el Salado. Además, Santa Fe, Santo Tomé y las instituciones representativas de la industria y el comercio de la región tienen opinión formada respecto de que ésta es la mejor ubicación", sostuvo el ex intendente de la ciudad.


Tiempo después, en octubre de 2007, el ingeniero Osvaldo Contursi – Director de Estudios y Proyectos de Vialidad Provincial - explicó las características que tendría el nuevo puente. “Va a tener cuatro vías, dos por cada sentido”, describió el funcionario, la penetración en Santo Tomé “será por calle Hernandarias, luego va hacia el lado de los cuartales saliendo por calle Richieri hasta Ruta 11, sigue hasta la zona de la fábrica Purina y se conecta con la Ruta Provincial 5 hasta la Ruta 19”, prosiguió. Algunos de estos cruces serán a nivel y otros elevados. “El paso por la Ruta 19 será con un intercambiador y en el caso de unirse la 11 con la 5 tenemos proyectada una rotonda”, agregó.

Para el ingreso por Santa Fe el nuevo puente enlazaría con la avenida Mar Argentino y tiene como calles de penetración a Francia y Urquiza. Contursi señaló en aquel momento, que luego de una larga discusión con los funcionarios de Martín Balbarrey, “acordamos con la municipalidad hacer un cambio en el sentido de circulación de estas dos calles. Urquiza sería hacia el norte y Francia hacia el sur”.

Ahora, esta elección y el anteproyecto elaborado por lo técnicos de la provincia, la UNL y la UTN, se encuentra bajo análisis de la Dirección Nacional de Vialidad. Según adelantó el ingeniero Rafael Pretto, Jefe Distrito VII del organismo, “esta obra tiene un impacto urbano, social y ambiental muy fuerte en Santo Tomé”.

El funcionario nacional sostuvo que la reunión del pasado 11 de julio fue solicitada para despejar algunas dudas de carácter técnico surgidas con el anteproyecto presentado el año pasado por el gobierno de la provincia. “Como eran evaluaciones muy generales y las planimetrías que se presentaron tenían dimensiones que no respetan las normas de diseño para una ruta nacional, se creyó oportuno tener una reunión técnica acá en Santa Fe con los municipios y la DPV para consensuar y evaluar las opiniones de cada unos de los actores”, aclaró Pretto.

“Vialidad Nacional lo que evalúa más fuertemente son los diseños viales, pero como esta obra tiene un impacto urbano, social y ambiental muy fuerte en Santo Tomé, necesitamos tener el consenso del municipio”.

Todas estas dudas deberían quedar despejadas con el estudio de impacto ambiental. “Nosotros pedimos que debe ser aprobado por los organismos específicos provinciales. Aquí sería la Secretaria de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable y el Ministerio de Aguas, por todo lo relativo a la solución hídrica del sistema. No obstante se esta evaluando todo lo que es el diseño geométrico y estructural de la propuesta vial”.

Sobre este último punto, Pretto precisó que “las normas de diseño vial en rutas nacionales establecen distintos parámetros, como anchos de calzada mínimo, espesores para tránsito determinado, composición de la carpeta, evaluación de las cargas, impacto del clima en los materiales, situación hídrica de la zona. Todos estos elementos sirven para definir la solución más apropiada para el paquete estructural y los materiales”.

A partir de estos parámetros, en la propuesta de la traza sur para el ingreso a nuestra ciudad, los técnicos de Vialidad se encontraron con un diseño al que calificaron de “acotado”.

“Estamos entrando con fórceps a las calles de Santo Tomé. Se pretende hacer una avenida urbana con tránsito nacional e internacional de camiones, colectivos y otros vehículos pesados, y el diseño tiene que estar acorde a este tipo de transito pasante”, dijo Rafael Pretto.

“La traza debería tener las dimensiones apropiadas para absorber un tránsito de estas características, como es 27 de Febrero y Alem en Santa Fe. Pero como el sector de Santo Tomé es más comprimido la solución propuesta recurre a las barandas de hormigón tipo New Jersey (como tiene la Ruta 168) y eso en una avenida urbana tiene un impacto muy fuerte. Es como una barrera que corta que no permite el paso de peatones. Estaríamos poniendo en la ciudad una barrera importante, provocando un corte respecto al crecimiento urbano hacia el sur, que es hacia donde se expande Santo Tome”, continuó.

“Allí tenemos una calle existente con un ancho determinado y dentro de ese ancho tenemos que meter una avenida urbana. Y si hay que expropiar estaríamos frente a un problema mayor, no solo por el costo, sino por el impacto social, habría que desalojar gente, buscarle otro destino. Entonces, el hecho de incorporar una ruta nacional dentro de una ciudad tiene un impacto social, urbanístico y ambiental”.

Este problema es conocido por las actuales autoridades de la ciudad. Luego de la reunión del 11 de julio en la sede del Distrito VII de Vialidad Nacional, el intendente Fabián Palo Oliver le dijo a la prensa que es necesario “evaluar adecuadamente las afectaciones urbanas de la traza sur”, destacando “el costo social que esta alternativa traería especialmente para los santotomesinos que no están contemplados en el proyecto y tenemos que evaluar”.

Esta postura sobre el impacto de la traza es la misma que el actual intendente sostuvo en varias ocasiones cuando fue concejal de la ciudad. “Insistimos en que una obra tan necesaria como un nuevo puente entre nuestra ciudad y la capital provincial debe ser proyectada de común acuerdo en cuanto a evaluaciones técnicas urbanísticas, ambientales, económicas y regionales, mientras que la resolución de la ubicación debería incluir también la evaluación y el análisis de la mayoría de la comunidad santotomesina", reclamó Palo Oliver, según puede leerse en un comunicado de prensa difundido en marzo de 2007.

Por eso no debe sorprender que las prevenciones de los técnicos de Vialidad Nacional sean bien recibidas por las actuales autoridades de la ciudad de Santo Tomé. Las dudas quedarán despejadas cuando el organismo de a conocer su evaluación del anteproyecto presentado por la provincia.

“Hoy estamos estudiando la Alternativa 7 que es la que nos presentó Vialidad Provincial, se van a analizar las ventajas y las desventajas, y se responderá a la provincia. Esto no impide que se proponga el análisis de otras alternativas que la provincia pueda presentar o que Vialidad Nacional pueda evaluar”, sostuvo Rafael Pretto, abriendo la puerta a un cambio sustancial en el diseño del nuevo puente.

Todo este análisis tiene que concluir en un pliego de licitación donde se pueda licitar proyecto ejecutivo y ejecución de obra. Por lo tanto el pliego tiene que ser lo más preciso posible en la parámetros de diseño que se le den al oferente para que pueda cotizar su proyecto”, agregó el funcionario, al tiempo que remarcó que “Vialidad Nacional ya tiene dentro de su presupuesto 2008 una cantidad importante de fondos asignados para esta obra”.


La postura provincial

Para el ministro de Obras Públicas de Santa Fe, arquitecto Hugo Storero, la ubicación del nuevo puente entre Santo Tomé y la capital provincial todavía se encuentra en discusión y no ha siso definida. “Se evaluaron los trazas y los técnicos de Vialidad Nacional recorrieron los lugares alternativos y se fueron con varios interrogantes sobre si lo más conveniente es la traza sur o la traza norte”, dijo el funcionario ante una consulta.

“Sobre lo que estaba definido vuelven a generarse interrogantes desde el organismo nacional. Estamos en este proceso. Lo que pude deducir del administrador nacional es que estarían en condiciones de lanzar la licitación con el anteproyecto indicativo a los efectos que se evalué proyecto ejecutivo y precio de la obra. Esta es una manera muy corta de resolver una licitación pública porque te ahorra el tiempo de elaboración del proyecto”, sostuvo Storero.

Respecto al impacto urbano de la obra en nuestra ciudad, el ministro aseguró: ”donde pongas el puente se va transformar en una barrera. Quizás con una buena semaforización se puede lograr algún tipo de mejora. Hay que ver cuanto del flujo e vehículos que pasa por el puente Carretero se iría por la nueva traza”.

“Si miramos el proyecto desde la perspectiva de Santa Fe es muy buena la entrada sur. La entrada norte se mete en la ciudad por Mendoza, en un sector que se ha poblado mucho. Si entramos por General López (en la capital provincial) esta el problema de la traza ferroviaria y los terrenos del ONABE que no son sencillos de negociar, es muy compleja la transacción. De todos modos, está la alternativa de derivar el transito por la avenida Circunvalación hasta el intercambiador de CILSA para que el tránsito no entre a la ciudad”, explicó el ministro en su despacho.

Para Storero es imprescindible la opinión de los responsables de las dos ciudades. “Barletta (Mario) ya ha planteado que la traza no puede entrar por calle Francia. Es una opción terrible que supone la inversión del sentido de avenida Urquiza. Yo creo que si se elige la traza sur hay que dejarla en la avenida Mar Argentino y no meterse en la ciudad. Yo también me opondría a eso y dejaría las bajadas habituales”.

Respecto a los tiempos del proyecto, el ministro reclamó que la Nación cumpla con sus compromisos y avance con la licitación cuanto antes. “Cuando sale la decisión de hacer la Ruta 19 con aportes de la provincia mediante un crédito del Banco Mundial, la Nación se obliga en un convenio posterior a resarcir a la provincia pagando la obra del puente Santa Fe – Santo Tome. Por eso quiero dejar en claro que la provincia cumplió con lo suyo y la Nación todavía esta en situación de análisis. Yo soy muy confiado en la palabra de la gente, pero gestiono y demando que la obra se haga”.

En este sentido, el ministro destacó que el proceso de licitación debería efectuarse de manera abreviada convocando a las empresas interesadas a la presentación de ofertas que contengan la elaboración del proyecto ejecutivo y la ejecución de la obra. “De esta de manera la comisión de adjudicación realiza una doble evaluación, monto de la obra y proyecto ejecutivo, que debe ser formulado de acuerdo a sus fines y cubrir todos los detalles, esto acorta mucho los tiempos. Por eso a mi no me preocupa que se defina una traza u otra, siempre que se acorte el camino de la licitación con el anteproyecto indicativo”.

Si bien Storero admite que los funcionarios de Vialidad Nacional manifestaron buena predisposición para concretar el proyecto, el panorama general no deja de ser preocupante. “Veo que la Nación está retaceando niveles de inversión. Por ejemplo, el Plan Federal de Viviendas II todavía no arrancó. El Plan de 1000 escuelas fue anunciado pero todavía no aparecieron. No se han concluido los trabajos del Plan 700 escuelas. Le fue muy mal a la provincia durante la gestión anterior, mal en serio, porque de las 700 escuelas para todo el país ¿Cuántas recibió Santa Fe? Si partimos de la coparticipación, Santa Fe recibe el 10 por ciento de los recursos, esto es 70 escuelas. Si partimos de los recursos que aporta la provincia, que son el 20 por ciento, esto da 140 esuelas. Bueno, nos tocaron nueve y trece están en marcha”.

“Me parece que es falta de dinero a nivel nacional. En vivienda se nota el retaceo en todo el país, en la obra pública vial se notan demoras, en la obra de escuelas se nota retaceo. ¿Qué me imagino yo? Que hay cuentas comprometidas, tal vez no sea el nivel de expansión que tuvo el país en los últimos años, tal vez la crisis del campo”, continuó el ministro.

Pero a pesar de estas prevenciones, el arquitecto Storero cree que el proyecto de nuevo puente podrá concretarse sin mayores dificultades. “Esta obra para la Nación es muy chica, pensemos que son 120 millones de dólares y yo note muy dispuesto al administrador nacional de vialidad y están los técnicos trabajando. Hay partida presupuestaria para este año, lo cual es un buen signo y hay intención de resolver sobre cual traza se hace el proyecto para avanzar en un trámite corto con la licitación”, finalizó.

sábado, julio 5

OTRO PROBLEMA HEREDADO

La obra más emblemática de la ciudad de Santo Tomé se encuentra paralizada desde diciembre pasado. Existen problemas técnicos y un reclamo económico de la empresa contratista por los daños sufridos durante la inundación de 2007. Las autoridades del Ministerio de Aguas prometieron resolver el conflicto en los próximos 30 días. Los trabajos se realizaron sin proyecto ejecutivo aprobado.


Publicado en revista "Santo Tome Investiga" - Mayo 2008

Autor: Pablo Bosch


En los próximos treinta días los funcionarios del nuevo misterio de Aguas, Servicio Públicos y Medio Ambiente resolverán bajo que condiciones continuará la obra de protección de la margen derecha del Río Salado en el tramo Anfiteatro – Puente Carretero.

Los trabajos en esta obra emblemática de la ciudad se encuentran paralizados desde diciembre pasado por dos razones fundamentales: problemas técnicos en el hincado de las tablestacas y un reclamo millonario de la empresa contratista por los daños sufridos durante la inundación de 2007.

A estas dificultades se tiene que agregar un dato de gran significación. A 32 meses del comienzo de los trabajos el proyecto ejecutivo de la obra todavía no fue aprobado por las autoridades del ministerio. De este modo, ni la empresa ni la provincia saben como se terminará la costanera santotomesina, que ya tiene acumulado un costo de 40 millones de pesos.

Un poco de historia

El 4 de julio de 2005, el entonces gobernador Jorge Obeid firmó el Decreto 1386 adjudicando la obra de protección de la costanera de nuestra ciudad a la empresa Ecodyma Constructora S.A. El presupuesto oficial había sido establecido $ 22.805.859 y la firma ganadora se alzó con la licitación ofertando $ 28.499.480. Los trabajos comenzaron en septiembre de ese año y tenían un plazo de ejecución de 18 meses. Al poco tiempo aparecieron los primeros problemas.

Se encontraron diferencias de cotas y en la ubicación trazas en los desagües pluviales en el punto de inicio de la obra. Como consecuencia de esta discordancia algunas bocas de salida quedaban tapadas.

Debido a que la obra se inició sin proyecto ejecutivo aprobado, a medida que avanzaban los trabajos se iban descubriendo los problemas. El más grave involucró a las tablestacas. Aparecieron lugares de la costa con una profundidad mayor a la estimada originalmente. Esto alteraba el diseño original, con el consiguiente aumento de costos, debido a la mayor longitud requerida para las piezas.

En aquel momento los funcionarios provinciales justificaron los problemas en el apuro por licitar. "Lo que tenemos que tener en cuenta para esta obra es la urgencia con la que hubo que salir adelante y llamar a licitación; por suerte el gobernador (Jorge Obeid) y el ministro (Alberto Joaquín) pudieron conseguir los casi 29 millones que representa la misma. Se tuvo que licitar con un anteproyecto, que no es muy distinto a lo que se está ejecutando”, dijo el subsecretario de Infraestructura del Ministerio de Asuntos Hídricos Carlos Maina. (El Litoral – 12/06/06)

Sin embargo, la realidad fue mostrando que las diferencias eran cada vez más visibles. “Una de las condiciones para la empresa era que debía realizar un cálculo definitivo que avalara lo que nosotros habíamos hecho; o en su defecto, lo modificara por lo que se ejecutaría”, agregó Maina. Lo cierto es que estas modificaciones en el sistema de tablestacas derivaron en un cambio de proveedor y en mayores demoras para su colocación.

En el esquema original, la provisión y colección de las tablestacas debía realizarse entre enero y julio de 2006, pero recién estuvieron disponibles en octubre de 2006. Se trataba de 662 elementos fabricados en Luxemburgo por la empresa Arcelor, con una longitud de 14 y 16 metros, destinados a conformar una pantalla metálica de 496 metros sobre la barranca del río Salado.

Para comienzos de 2007 los trabajos estaban encaminados, pero la inundación de marzo complicó severamente el panorama. El obrador quedó bajo agua, algunas máquinas se dañaron y el proceso de hincado de las tablestacas fue interrumpido.

El apuro por terminar los trabajos volvió con las elecciones. En agosto del año pasado, el subsecretario Carlos Maina visitó la obra y anticipó una fecha de finalización. “Con el terraplén en el que estamos y las tablestacas que se están colocando, que son las que aseguran que el mismo quede para siempre, el objetivo primordial ya se estaría alcanzando; inmediatamente habrá que empezar con lo que tiene que ver con la parte arquitectónica y lo que es el paseo en sí, para que a fin de año pueda estar todo construido", vaticinó el funcionario.

Pero el esfuerzo de Ecodyma no alcanzó el ritmo que requería el marketing electoral del justicialismo y la última tablestaca recién fue colocada el 4 de octubre, cuando el resultado de las urnas había sepultado las expectativas de Angel Piaggio. Igualmente la ocasión fue propicia para que Jorge Obeid se saque una foto con sus funcionarios recorriendo la barranca.

Esa mañana, desde la Casa de Gobierno distribuyeron un comunicado que decía: “Jorge Obeid, acompañado del ministro de Asuntos Hídricos, Alberto Joaquín, y el Subsecretario de Gestión y Planificación, Pablo Casik, observó el avance de la gran obra que con una inversión superior a los 28.000.000 de pesos viene ejecutando el Gobierno de la provincia en la costa santotomesina”. El texto ya no especificaba plazos de terminación. Faltaba poco tiempo para el cambio de autoridades y una nueva paralización de la obra.

Parálisis y reclamo

Cuando las autoridades del nuevo ministerio de Aguas, Servicio Públicos y Medio Ambiente, tomaron contacto con la obra de protección de la barranca del río Salado, encontraron que el proyecto ejecutivo nunca había sido aprobado y que la contratista Ecodyma había presentado un reclamo administrativo por daños.

Consultado por STI, el ingeniero Fernando Mussi, subsecretario del Ministerio de Aguas, explicó que “en este momento la obra esta paralizada, estamos evaluando y analizando el proyecto ejecutivo, porque lo que se construyó hasta el momento se hizo sin el proyecto aprobado”.

Mussi agregó: “Se arrancó la obra con un proyecto básico y el proyecto ejecutivo era obligación de la contratista. Cuando iniciamos la gestión nos encontramos con un proyecto ejecutivo que no estaba aprobado. No se si esto es legal o no, pero nosotros con las obras que tenemos que empezar ahora, no lo hacemos hasta que la empresa tenga aprobado el proyecto ejecutivo”.

El funcionario precisó que se encontraron “con una obra que no tenía la ingeniería aprobada y no sabíamos si estábamos haciendo una obra con los problemas técnicos bien resueltos”.

“Son cuestiones técnicas sobre el funcionamiento de las estructuras que no afectan la seguridad, por lo menos hasta donde vimos nosotros”, aclaró.

El dato novedoso, es que además de los problemas de ingeniería que se están tratando de resolver, la empresa reclama una compensación económica por daños. “La obra esta paralizada desde diciembre, porque además hay un reclamo económico de la empresa por los perjuicios y daños que tuvo en la inundación de principios de 2007”, reveló Fernando Mussi.

Lejos de los cálculos originales, el funcionario precisó que el presupuesto de la obra ya llegó a los 40 millones, de los cuales están hechos cerca de 28 millones.

“La empresa esta reclamando 2,2 millones. Estamos en conversaciones y queremos resolver esto rápido. Lo que nos preocupa es arrancar con la obra cuanto antes”, aseguró el subsecretario.

Mussi sostuvo que se están evaluando los daños que la empresa dice haber sufrido por la inundación de marzo de 2007. “Hubo daños en el obrador, en los equipos y en la misma obra. Lo que piden es razonable porque efectivamente sufrieron daños, las diferencias surgen al momento de cuantificar económicamente ese impacto dentro de lo que esta previsto en el contrato. Pero como existen cuestiones que no están bien especificadas, el análisis en particular no es tan claro”.

La nueva gestión sostiene que la superación de las diferencias con la empresa solo podrá alcanzarse cuando exista un proyecto ejecutivo aprobado. “Lo revisamos y se lo devolvimos porque había algunas cuestiones que no estaban bien. Ahora la empresa lo esta modificando”, aseguró Mussi.

Entre los temas de análisis se encuentran las tablestacas que no se pudieron terminar de hincar como originalmente estaba previsto. Los problemas surgieron por la forma en que se hizo la operación y en las condiciones del suelo. Si bien el tema es complejo, desde el ministerio aseguran que todo esto tiene solución técnica y se lo esta conversando con la empresa.

“Nosotros ahora estamos en conversaciones con la empresa y suponemos que en 30 días debemos tener todo resuelto”, vaticinó Mussi.

“Yo estimo que quedan entre 8 y 10 meses de trabajo. La obra tiene el tablestacado completo, lo que hay que hacer es la viga de vinculación, después hay que hacer un refulado para rellenar todo a una cota determinada, después se hace una pendiente hasta el nivel superior y allí se construye un camino costero”.

Pero más allá de las buenas intenciones de los funcionarios todavía quedan muchas cuestiones por resolver. La primera es saber si la empresa quiere seguir al frente de la obra. La otra es conocer cuanta plata extra el gobierno esta dispuesto a poner para destrabar la obra. Por ahora los trabajos siguen paralizados y el plazo más cercano fue fijado en 30 días.

domingo, abril 6

EL GRAN CONSTRUCTOR

La auditoria de la FCE-UNL detectó varias irregularidades en el plan de obras públicas ejecutadas en la municipalidad de Santo Tomé durante la gestión de Ángel Piaggio. Algunas decisiones tomadas en ese periodo condicionan los planes de Fabián Palo Oliver. Los principales proyectos fueron adjudicados a Lalla Construcciones. Los funcionarios santotomesinos admiten que existe una situación de dependencia con esta empresa.

A comienzos de marzo el intendente Fabián Palo Oliver presentó a la prensa los principales resultados del estudio realizado por la Cátedra de Auditoria de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional del Litoral sobre el estado patrimonial, económico y financiero de la Municipalidad de Santo Tomé al momento en que asumieron la administración de la ciudad las nuevas autoridades.

En aquella oportunidad, Palo Oliver apuntó sus dardos a la precaria situación financiera heredada. “Podemos remarcar en primer lugar que la deuda municipal durante el año 2007 se incrementó en un 120 por ciento en relación a 2006", dijo el intendente, pasando de 5,9 a 12,9 millones de pesos. Situación que provoca un severo desfinanciamiento del Estado municipal, a partir de la cantidad de compromisos asumidos durante el segundo semestre del año 2007.

“Esto está relacionado con la presencia de la campaña electoral, porque estos gastos se dieron desde junio a septiembre y se siguieron pagando compromisos hasta el mes de diciembre", señaló Palo Oliver. Por ello no fue casual que el intendente eligiera como ejemplo de esta situación la Partida Nº 2.045, denominada “Difusión”.

Según explicó, en el presupuesto aprobado por el Concejo Municipal se estableció que los gastos de difusión serían de $ 59.000 durante todo el año 2007, pero de acuerdo al informe de auditoria, al finalizar el ejercicio se habían pagado $ 210.133,52, notándose un fuerte incremento en los meses de junio, julio, agosto y septiembre.

En el resumen entregado a la prensa se observa que las contrataciones para difusión se concentraron en cuatro empresas: Américo Giménez ($ 9.744,68); Juan Nepote ($ 14.561,14) Product. Indep. Asoc. S.A. ($ 14.043,26); y Televisión Federal S.A. ($ 18.131,85).

El otro hallazgo de los auditores - que revela como pocos la naturaleza del “estilo de gestión Piaggio” – es la aplicación de los diferentes convenios de financiamiento para obras públicas y compras de equipos. "Vinieron fondos de distintos organismos por un monto $ 700.000; ese dinero debía haberse destinado al pago de distintos certificados de obras de empresas adjudicatarias que están construyendo en la ciudad”, pero lo sorprendente, fue que al momento de asumir la nueva gestión se encontró con el reclamo de las empresas sino y con el faltante de dichos fondos, que aparentemente (según sostiene la auditoria) se utilizaron para realizar otros pagos.

Pero los problemas detectados en el área de obras públicas no se limitaron a estos desvíos de fondos. Se detectaron solicitudes de ampliación de obras y aprovisionamiento de bienes acordados “de palabra”, se efectuaron pagos anticipados sin justificación y se aprobaron ajustes de precios sin el correspondiente respaldo financiero, lo cual compromete la continuidad del plan de trabajos públicos.

Compras directas

Según un difundido proverbio chino toda crisis se presenta como peligro u oportunidad. Y si quisiéramos aplicar este concepto para el caso de las inundaciones de marzo de 2007, encontraríamos que varios peligros acecharon a los vecinos y que las oportunidades fueron aprovechadas por algunas empresas de la ciudad.

En el origen de todo esto se encuentra el pedido que el ex intendente Ángel Piaggio le hizo al Concejo Municipal para lograr “la suspensión del régimen de compras y contrataciones vigente” con el objetivo de realizar la “adquisición y/o contratación directa de bienes y servicios necesarios para afrontar las consecuencias” derivadas de las inundaciones.

Analizando las contrataciones efectuadas durante el año 2007, la auditoria de la FCE-UNL encontró que la mayoría de los trámites se realizó bajo la modalidad del Concurso Privado de Precios, donde solo pueden participar las empresas que son especialmente invitadas por la administración municipal. Se puede decir que las circunstancias especiales que afectaban la ciudad justificaban esta vía de excepción, pero la reiteración de algunos nombres entre los adjudicatarios, llama poderosamente la atención.

Según las planillas anexas al informe de auditoria, a las que tuvo acceso Fuera de Foco, la empresa Lalla Construcciones obtuvo 17 contratos con la municipalidad durante el 2007; seguida por Silvana Román con 7 contratos y Maria Eugenia Bouvier con otros 6 contratos.
Ahora bien, si se consideran los montos de estas operaciones, Lalla Construcciones se destaca claramente entre todas las empresas. En el último año de la gestión Piaggio firmó contratos por $ 10.881.817, lo que equivale al 56% del monto total gastado por la municipalidad para la adquisición de bienes, alquiler de equipos o realización de trabajos públicos. Si se amplia el espectro de análisis se encuentra que solo 5 empresas concentran el 76% de las contrataciones.

Si bien de esta situación, en principio, no surge ninguna irregularidad, para las nuevas autoridades constituye un motivo de preocupación. “Evidentemente hay una empresa santotomesina que en más contrataciones ha sido adjudicataria. Es un dato objetivo que no tiene que ver con las modalidades de contratación”, dijo el Secretario de Hacienda de la municipalidad, Adrián Masino. “A mi me gustaría que esto hubiera estado más diversificado”, agregó.

“Esto se dio en el marco de la autorización que el Concejo Municipal dio para poder concursar por la emergencia hídrica del 2007. En este momento no contamos con esa posibilidad. El contexto de la emergencia encaminó todo para que la empresa sea beneficiaría de muchas obras”.

Para este funcionario la relación con Lalla Construcciones es muy compleja y llevará tiempo encauzarla. “En este caso hay una dependencia de la municipalidad con esta empresa, que hace las obras más trascendentes para la ciudad, y por otro lado hay una dependencia de la empresa con la municipalidad en cuanto a su subsistencia financiera. Entiendo que no tiene muchas obras en otras localidades de la provincia o el país. En principio no habría diversificado su actividad en otras jurisdicciones”.

De cara al futuro, Masino admite que “si gana siempre esta empresa va a ser difícil decirle que no, en tanto demuestre capacidad para ejecutar varia obras a la vez. Por eso los controles de cumplimiento de contrato van a ser estrictos”, sentenció.

Favores recibidos

La posición de privilegio que Lalla Construcciones alcanzó durante la gestión Piaggio también queda en evidencia por el trato preferencial que la empresa recibió en la administración de sus contratos. En el informe de la auditoria se encontraron solicitudes de ampliación de obra acordadas “de palabra”, donde no se respetaron los pasos administrativos correspondientes para este tipo de trámites.

En la Licitación Pública Nº 02/07, convocada para la Construcción de Mejorado en Calles Urbanas, la empresa presentó un reclamo por $ 116.321,37, invocando un acuerdo de palabra con la anterior gestión. Cuando se le requirió la presentación de los documentos emitidos por la inspección, que acrediten que los trabajos que pretendía cobrar efectivamente fueron realizados, solo pudo exhibir dos certificados de obra: uno por $ 53.247,66 y otro por $ 17.676,45.

“Al día siguiente que asumimos Lalla trajo un detalle con el millón cien mil pesos que la municipalidad le debía”, recuerda el Secretario de Hacienda. “Con la auditoria detectamos 116.000 pesos para el mejoramiento de calles que fueron acordados de palabra, nosotros solo pudimos verificar 70.000 pesos, y a partir de esa verificación hicimos el decreto con el contrato que ya lo cancelamos”.

Como resultado de estos controles, la empresa no pudo cobrar casi 46.000 pesos, pese a los cual, al momento de retirar los cheques no presentaron objeciones. “No se si iniciaran alguna acción por la diferencia, por lo general cuando suceden estas cosas en el momento de recibir el pago se deja constancia de la disconformidad, pero esto no pasó”, según dijo Masino.

El otro caso fue protagonizado por Arenera Román, de Silvana Román, que presentó una solicitud de ampliación de compra en el marco del Concurso Privado 10/07, convocado para la provisión de material pétreo. El reclamo fue por un adicional de 414,40 toneladas, por la suma de $ 27.200, exhibiendo como único comprobante un remito entregado Obrador Municipal Nº 2.

En ambas ocasiones y ante hechos consumados, el municipio emitió dos decretos correctivos, con el objetivo de regularizar la situación y no afectar obras ni proveedores involucrados. No obstante, las autoridades informaron que se encuentran analizando se analizan posibles medidas legales.

Otra situación irregular fue detectada en la obra de la Cloaca Máxima – Sector Sudoeste. Este proyecto se financia a través de un préstamo de la Dirección Provincial de Vivienda y Urbanismo de la Provincia de $ 6.463.277. Los trabajos fueron adjudicados mediante Licitación Pública 02/2006 a la empresa Lalla Construcciones por un valor de $ 6.647.796. El plazo de obra comenzó a partir de septiembre de 2006. El Municipio se obligó a reintegrarlo en un plazo de 10 años con un interés del 10% anual sobre saldo, en cuotas de $ 71.755,30 con garantía de la coparticipación provincial. Al inicio se recibió un anticipo financiero del 15% y el resto se viene entregando contra certificados mensuales de avance de obra.

La auditoria detectó una deficiente administración financiera del proyecto expresada en la confusión de las cuentas de Obras y las Rentas Generales. En enero de 2006 el municipio recibió el anticipo del 15% ($ 969.491,55) que fueron depositados en la cuenta 2804/06 del Banco Santa Fe Sucursal Santo Tomé. Lo grave es que esta cuenta ya venía siendo utilizada para la obra de Pavimento Calle Alberdi a cargo de Obring S.A.

Del análisis de los movimientos de fondos entre enero y noviembre de 2006 destinados a la obra Pavimento Calle Alberdi, surge que fueron más los pagos (extracciones) que los fondos recibidos (depósitos). Esto significa que una parte de la obra de pavimentación se financió con el anticipo de la obra de la Cloaca Sudoeste que fue depositado en la misma cuenta.

A su vez, al momento de asumir la nueva gestión, la obra de cloacas tenía pendiente un reintegro desde Rentas Generales de $ 195.202,10, que habían sido extraídos para fines distintos a los acordados con la Provincia.

En total se detectaron desvíos de fondos afectados para obras públicas por más de 700.000 pesos. “Se usaron para otros fines, no se usaron para los fines con que arribaron a la tesorería municipal y cuando asumimos nosotros no estaba el dinero. ¿Qué fue lo que pasó? Se gastó, por ejemplo, en la contratación de camiones para que junten la basura o para publicidad, pero ahora ese dinero no está más”, lamentó el Secretario de Hacienda.

Pero además, en medio este confuso manejo financiero la gestión Piaggio acordó con Lalla Construcciones pagos anticipados al margen de los vencimientos estipulados en el pliego de Bases y Condiciones de la licitación. La auditoria detectó que en la fecha en que se debía pagar el Certificado 14, la municipalidad ya lo había abonado y además había anticipado el 70% del Certificado 15.

El mismo esquema de anticipo de pagos a favor de Lalla Construcciones fue detectado en obra del colector cloacal Balcarce.

Esta política de adelantamiento de pagos significó un beneficio financiero concreto para la empresa contratista. Por estos favores el municipio no recibió ningún tipo de descuento ni tampoco consideración al momento de confeccionar los reclamos por redeterminaciones de precios abonadas en el 2007 al proveedor, en reconocimiento a inflación de costos.

Por este rubro se pagaron adicionales muy importantes. Hay que tener presente que para la actualización de precios se toma el periodo que va desde el inicio de los trabajos hasta la fecha del pago del certificado de obra. En el caso de la obra de cloacas sudoeste, Lalla Construcciones cobró por redeterminación de precios $ 326.669,95 hasta el Certificado Nº 9. “La inflación mayorista o el índice de la construcción es un poco más alta que los precios al consumidor y terminamos hablando de un 26 o 27 por ciento de ajuste anual”, explica Masino.

Pero como este problema no fue previsto por la anterior gestión, el pago de los adicionales por redeterminación de precio esta consumiendo parte de los préstamos otorgados, comprometiendo el futuro de las obras. “La necesidad de financiamiento para continuar con las obras es alta. Vamos a necesitar el monto de la obra multiplicado por los índices de actualización de precios. Por ahora lo estamos financiando con recursos propios mientras hacemos las gestiones para que estos fondos adicionales entre en los préstamos. Pero esto debería haber hecho desde el inicio, con una presentación para que la redeterminación de precios también este financiada”.

Los problemas pueden surgir cuando se acerque el final de la obra. Si continua este ritmo de ajuste de precios, se van a terminar pagando adicionales por un importe similar al abonado hasta ahora.

Igualmente, Masino asegura que las obras que ya están en marcha se van a sostener. “Pero tenemos dificultades para encarar obras nuevas, porque las obras pesadas solo se pueden hacer con financiamiento externa y la situación financiera en la que estamos nosotros no nos da capacidad de endeudamiento, entonces todo el plan de obras que teníamos pensado esta a la espera de una mejor situación financiera”.

Retomando las palabras del Secretario de Hacienda, la situación de dependencia mutua entre el municipio y Lalla Construcciones, condiciona severamente el programa de obras públicas de la ciudad. Antes de pensar en nuevos proyectos, desde la gestión de Palo Oliver aseguran que se debe resolver la manera de afrontar los contratos ya existentes y el impacto de los adicionales por redeterminación de precios que crecen al ritmo de la inflación.

martes, enero 29

HARÁN ESTUDIOS SOBRE LA ESTABILIDAD DEL PUENTE COLGANTE

Lo confirmó el secretario de Obras Públicas de la municipalidad Roberto Porta. Preocupan los hundimientos en la cabecera oeste, las filtraciones de agua en las cámaras de anclaje y las ondulaciones en la calzada. Los problemas fueron advertidos hace varios años pero nunca recibieron atención. La obra no tiene recepción definitiva por parte de Vialidad Provincial. Analizan restringir el transito peatonal en el sector afectado.

Desde hace varios años distintos sectores de la comunidad santafesina vienen manifestando su preocupación por los hundimientos que se observan a simple vista en la cabecera oeste del puente colgante y su zona aledaña. Frente a estos reclamos, los funcionarios de Vialidad Provincial durante la gestión de Jorge Obeid, aseguraron que se trataba de movimientos de suelo previsibles que no afectaban la estabilidad del viaducto.

Una de las voces que en su momento se levantó fue la del ingeniero Roberto Porta – integrante por entonces de la Cámara Apyme de la Construcción, del Foro Económico Social Leyes-Setúbal-Salado y actual integrante del gabinete de Mario Barletta - quien llegó con sus planteos hasta el despacho del Ministerio de Obras Públicas de la Provincia sin obtener respuesta.

Ahora como Secretario de Obras Públicas de la Municipalidad insiste con sus temores. “Estamos altamente preocupados por la estructura que esta aledaña al estribo oeste del Puente Colgante y también nos preocupa mucho el puente en si mismo, porque las cámaras de anclaje de los cables están inundadas y también creemos que hay algunas imperfecciones en el tablero”, reveló Roberto Porta en dialogo con el programa Fuera de Foco.

Con el objetivo de iniciar rápidamente una serie de estudios sobre la estructura del puente colgante, los funcionarios municipales se pusieron en contacto con la Dirección de Vialidad Provincial. Este tiene a su cargo el mantenimiento de la obra y es encargado de aprobar de manera definitiva el tesado de los cables del puente.

“El puente fue recepcionado sin la aprobación del tesado de los cables. En este momento es responsabilidad de la empresa CCI. Por esto le hemos pedido a Vialidad Provincial intervenir en la comisión responsable de la recepción definitiva de la obra del Puente Colgante”, precisó Porta.

Las dudas del funcionario surgen por las deformaciones que se ven en la calzada, que podrían motivarse en “que la tensión que se le está dando a los cables no es la correcta”.

“Si los desfasajes no son grandes solo provocan una deformación en la calzada y no ponen en peligro la estabilidad del puente. Ahora, si las tensiones son muy distintas a las que establece el protocolo de tesado se puede poner en riesgo la vida útil de los cables”, advirtió el secretario de Obras Públicas.

El otro tema de preocupación es la situación de los anclajes de los cables que sostienen el puente colgante. “Queremos ver si estas deformaciones de la calzada tienen relación con el estado de los anclajes. Nos llama mucho la atención que las cámaras donde se anclaron los cables, que deben ser impermeables, tengan una gran cantidad de agua en su interior”.

Restricción peatonal

El secretario de Obras Públicas descartó por el momento cualquier restricción al tránsito de vehículos pero señaló que se podría vedar el acceso a los peatones en el paseo de la cabecera oeste. “Si hay peligro de que alguna estructura pueda eclosionar, por supuesto que la vamos a cerrar, si llegamos a la conclusión de que no hay grandes peligros vamos a empezar a reproyectar ese sector para sustentarlo en el tiempo”, dijo Porta.

“La zona que más nos preocupa es la que está aledaña al estribo oeste del Puente Colgante, donde puede haber una mayor erosión que puede estar comprometiendo esa estructura, podría estar comprometiendo alguna estructura del puente y quizás las cámaras de anclaje. Por eso necesitamos hacer un análisis estructural de todo el sistema. En esta semana estamos terminando las reuniones de ajuste con Vialidad para disponer de todos los recursos necesarios para iniciar los estudios”, adelantó.

Si bien en este momento los funcionarios municipales “no encuentran signos que justifiquen interrumpir el tránsito vehicular”, no se descarta que en el futuro se pueda vedar el acceso a las personas. “Si estamos analizando restringir el tránsito peatonal en la zona del monumento metálico que llamamos antorcha”, dijo Porta para finalizar.

Socavones y grietas con historia

En julio de 2005 la Cámara Apyme de la Construcción cuestionó la seguridad del puente colgante de Santa Fe y exigió la realización de estudios para analizar los socavones que aparecían en las veredas de la cabecera oeste de la obra vial.

En aquel momento, el ingeniero Roberto Porta reclamó “clausurar esa zona e investigar qué pasa, cualquier persona que transite por ahí puede ver cómo la capacidad del piso fue socavada en diez centímetros”.


Al poco tiempo el Concejo Municipal de Santa Fe aprobó un proyecto de Resolución, presentado por los concejales Leonardo Simoniello y Jorge Henn, donde se establecía que el Intendente de la ciudad debía requerirle a la Provincia en un plazo perentorio “la información necesaria para conocer las causas que determinan el actual estado estructural que se verifica en las defensas de la Avda. Siete Jefes y las presuntas irregularidades en el Puente Colgante, así como también la situación de garantía de dicha obra”.

Los ediles expresaron en sus fundamentos que se han podido “constatar algunas deformaciones y fisuras sobre su mismo tablero y que presuntamente podrían estar relacionadas con el tensado de sus cables estructurales por no atender las condiciones específicas contenidas en el "Protocolo de Tesado", seguramente presentado oportunamente por el proyectista de la obra”.

Las sospechas sobre posibles problemas en las cámaras de anclaje se dispararon cuando una cuadrilla de Vialidad Provincial fue detectada realizando tareas de desagote con una bomba extractora en ambas cabeceras del puente. La explicación oficial fue que el agua se filtraba por los cables de acero y que todo se solucionaba sellando las cámaras con un material adhesivo.

Al poco tiempo, las autoridades de la DPV realizaron una inspección técnica de la obra y dieron a conocer un informe donde especificaban que las fisuras y deformaciones observadas en las escaleras y veredas del estribo oeste son “producto de posibles asentamientos en el sector de veredas del terraplén de la obra de defensa de la costanera” y no eran “consecuencia de problemas estructurales en el puente Colgante".

Respecto al tesado de los cables, Vialidad Provincial hizo pública una respuesta de la empresa CCI a un requerimiento de la repartición oficial, donde se informa “que el comportamiento de la estructura de cables del puente es la esperable y que no se han constatado desplazamientos o deformaciones no previsibles y por lo tanto no corresponde ninguna medida correctiva".

Finalmente, en relación a la presencia de agua en las cámaras de anclaje de ambas cabeceras del puente, losa funcionarios provinciales explicaron que se le solicitó a la empresa “la inspección de esas estructuras, la identificación de las causales de ingreso de agua y la propuesta de solución". De todos modos, aclararon que "el volumen de agua detectado no había alcanzado el nivel donde se encuentran los sistemas de sujeción, es decir que los cables no estaban en contacto con el agua", aunque debieron admitir que se trataba “de una situación no deseada y debe ser subsanada ya que va en detrimento útil de las estructuras".

Más cercanas en el tiempo aparecen las explicaciones de Edgardo Ragalli, secretario de Obras Publicas durante la gestión de Ezequiel Martín Balbarrey, que en noviembre de 2007 le dijo al diario El Litoral que las grietas y rajaduras aparecen porque “las altas temperaturas producen dilataciones de los materiales, lo que se va moviendo y con el tiempo aparecen las fisuras''. El otro motivo sería el asentamiento de la arena - producto de alguna filtración - que se colocó para levantar y "terminar el piso y no para defender la costanera''.

Para Ragalli la solución pasa por levantar el piso, rellenar con arena, compactarla, realizar un nuevo contrapiso y volver a colocar las lajas. "Es un trabajo lento, porque insume mucha mano de obra más que materiales (…) es un trabajo que hay que hacer hasta el faro ya que, en mayor o menor medida, estas fisuras se repiten a lo largo de toda la costanera'', sostuvo el hombre de Balbarrey.

Ahora la situación vuelve a su punto de origen, y estudios mediante, la nueva gestión de Mario Barletta deberá hacer frente a esta costosa obra de reparación.